"Crónicas de Ávalon" Emilio Carrillo B (22) Ho'oponopono - 2

Morgana interrumpió su exposición y permaneció en silencio varios hanadles. Por fin, dio una pequeña palmada y exclamó:

-¡Bueno, llegó el momento de hacer un breve descanso!. Lo necesitáis vosotras y lo preciso yo. Nos tomamos el tiempo justo para resarcirnos con un tentempié y disfrutar tanto del entorno del Tor como de la hermosa climatología con la que se ha engalanado hoy la Naturaleza-.

A la par que Morgana se volvía sobre sí misma, pasando a dar la espalda al auditorio, las hadas jóvenes se levantaron de sus sillas y ordenadamente empezaron a abandonar el salón. Yo me fui hacia ella y la felicité por la marcha de la exposición. Sin mediar palabra por su parte, me cogió de la mano y me arrastro con suavidad hacia el exterior, en dirección al Chalice Well, al que nos encaminamos en silencio dando un lento paseo. En cuanto llegamos al coqueto jardín, Morgana se acomodó en el banco más cercano al Pozo del Cáliz y me invitó a hacer lo mismo.

El Pozo del Cáliz está siempre rebosante de agua fresca y cristalina gracias a un rico manantial que brota de las profundidades de Ávalon. Acostumbra a estar tapado por una plancha de piedra sobre la que luce uno de los signos más notables de la geometría sagrada: el Vesica Piscis o Símbolo de la Creación, que es también interpretado en la isla cual signo de las almas gemelas, que es lo que todas las hadas consideran que son.

Nadie se hallaba por las cercanías, pues las hadas se habían dirigido a la parte trasera del Tor para degustar el tentempié que allí se estaba sirviendo. Imperaba el silencio, sólo salpicado por el canto y el jolgorio de una camada de gorriones. Esperé a que fuera Morgana quien arrancara la conversación, pues supuse que le gustaría aprovechar la pausa para dar reposo a sus cuerdas vocales y relajarse. Sin embargo, no tardó en hablarme:

-He observado que interiorizas con facilidad los contenidos de mi intervención. Para que lo añadas a tus propias meditaciones, te invito a que tengas en cuenta que la vida física se desarrolla en lo que la ciencia tilda cual Tercera Dimensión, que está definida por el espacio-tiempo finito, la dualidad y la materialidad. Inmersos en ella, la gente tiende a creer que las Dimensiones de mayor rango que puedan existir, a las que llaman celestiales y angelicales, son más sutiles, abstractas y difusas que la Tercera. Sin embargo, en absoluto es así, pues esas otras Dimensiones son radicalmente reales, mientras que la Tercera es puramente holográfica. Esto es muy importante para comprender como opera el ho´oponopono. La Tercera Dimensión conforma un escenario virtual revestido falazmente de solidez por medio de una materialidad que no es tal, sino energía y vibración de bajo nivel frecuencial-.

-Y en ese escenario cada uno representa su papel-, la interrumpí.

-En el escenario virtual de la Tercera Dimensión-, insistió en el concepto, -cada uno y en cada momento interpreta un papel y un guión definido por el grado de consciencia con el que se identifica y la visión del mundo y de su propia vida que a tal grado consciencial va asociada. 
De instante en instante, de momento en momento, cada persona proyecta el grado de consciencia que hace suyo sobre el marco virtual en el que se desenvuelve, configurando lo que denomina realidad, que, no obstante, considera algo objetivo y ajeno a ella misma. Pero esa realidad nada tiene de objetiva, al contrario, es totalmente subjetiva y carece de entidad real, es pura ilusión. Desde su consciencia interior, aunque no se percate de ello, el ser humano moldea y configura el exterior, que, sin embargo, estima algo impuesto, extraño a él mismo-.

-Me recuerda el célebre “la vida es sueño”, de Calderón de la Barca. Pero somos muchas las personas que hacemos lo mismo, que soñamos-.

-Exacto. Al ser multitud las personas que actúan en el escenario virtual, las proyecciones conjuntas de todas ellas conforman una gran Matriz Holográfica-Virtual. La coherencia o proximidad entre las distintas proyecciones es la base la Ley de Atracción. 
La Madre Tierra, auténtico ser viviente, cumple la función para la Humanidad de gigantesco Teatro-Matriz Holográfico donde cada persona interpreta el papel ligado al grado de consciencia que en cada momento asume, interactuando con los papeles y guiones desplegados por sus demás congéneres-.

-¿Y cuál es el propósito, si es que lo hay, para que exista tamaño Teatro Holográfico?-, le pregunté intuyendo la respuesta.

-El propósito es el aprendizaje de algo maravilloso: el Amor. La experiencia del Amor Incondicional y el ejercicio de tal Amor en la cotidianeidad y a menudo “contra resistencia” es la razón de ser en la Creación de tan espectacular Matriz Holográfica. Para aprender a Amar incondicionalmente nos encarnamos en la Tercera Dimensión y “jugamos” en la reiterada Matriz Holográfica, en el Gran Teatro del Mundo-.

-Todo lo cual engarza perfectamente con los contenidos del ho´oponopono-, le apunté.


-Si señor, ¡perfectamente!. Y hablando del ho´oponopono, es momento de retornar a la sala. Las hadas jóvenes deben estar impacientándose.-



Comentarios