El poder de la Palabra.



La profe del Taller de Escritura Creativa me pide que escriba un texto que se va a publicar en el periódico local La Semana, de Dos Hermanas. Se publicó el 8 de Febrero de 2017 lo siguiente:
"La Palabra.
"Y el Verbo (Logos) Divino" se hizo carne ... La palabra se hizo materia. Todo es energía creadora. El pensamiento (palabra) es creador. La palabra escrita, aún más. La palabra hablada es una potentísima forma de manifestación.
La palabra es vibración. La vibración es una forma de manifestación de la energía.
Cuando entendemos que el poder de nuestra mente es infinito, que todo lo creado es a través del pensamiento, comenzamos a hacernos res-ponsables (que no culpables) de nuestra existencia, a darnos cuenta de que somos lo que pensamos, lo que hablamos, lo que escribimos. Somos nuestras palabras.”

Ana Daza, a la que considero una mujer muy sabia donde las haya, le escuché hace unos 3 años en un Taller que empecé con ella: "Nos han enseñado a hablar y no nos han enseñado el significado real de las palabras que utilizamos". Desde entonces me dedico a buscar la etimología de las palabras que utilizo en nuestro lenguaje diario. Se lo he escuchado varias veces, y tiene toda la razón del mundo mundial.

Un ejemplo de lo más común: la palabra tan traída y llevada hoy día "crisis". CRISIS. Lat. crisis, del griego krisis “decisión” derivado de krino “yo decido, separo, juzgo”. (Breve Diccionario Etimológico de la Lengua Castellana de Joan Corominas). CRISIS. La palabra crisis viene del griego krisis y este del verbo krinein, que significa “separar” o “decidir”. Crisis es algo que se rompe y porque se rompe hay que analizarlo. La crisis nos obliga a pensar por tanto produce análisis y reflexión. (etimologias.dechile.net). ¿A que no tiene nada, pero nada que ver con lo que me cuentan? La palabra crisis la utilizo (mos) como sinónimo de carencia, y no es cierto. Es pararme para reflexionar sobre lo que ha ocurrido, y tomar decisiones. Las crisis están para re-inventarse. Suele ocurrir que, cuando tengo (mos) una “crisis”: relación de pareja, económica, de salud … cuando la Vida me da un buen zarandeo, es en esas ocasiones cuando suelo pararme y re-plantearme mi vida. Al parecer no sé hacerlo de otra forma.

Otra palabra que me gusta mucho matizar: RESPONSABILIDAD.- Latín responsum = responder. La “habilidad de responder”. (etimologias.dechile.net) Ojo: res-ponsabilidad no es culpa, palabra usada más comúnmente que la anterior en nuestro lenguaje coloquial. Decimos: “Yo (tu – ellos .. tiene(n) la culpa” no decimos la responsabilidad. Para reflexionar acerca de ello. Amén de que asumo totalmente convencida: “Cada cual es responsable de su Vida al 100%”, no mis padres, mi pareja, mi hijo, el gobierno … como solemos hacer.

Otra palabra que me entusiasma: COHERENCIA: “Viene del latín cohaerentia y designa la cualidad de lo que presenta una conexión o relación interna y global de sus distintas partes entre si.” El Breve Diccionario de Joan Corominas no contiene esta palabra. Que lo que pienso, siento y hago estén en armonía. Esa es la coherencia para mi sentir. Algo que persigo en mi día a día. El Maestro Yeshúa nos re-cordó: “Por sus hechos los conoceréis.” Otra frase que me viene al pelo, con sorna: “Haz lo que yo te digo y no lo que hago”.

Otra: RELIGIÓN.- Viene del latín religio. Significa algo así como “acción y efecto de ligar fuertemente”. (etimologias.dechile.net). El Breve Diccionario define: “escrúpulo, delicadeza”. Y sin embargo la historia nos muestra que las religiones, más que unir con escrúpulo y delicadeza, lo que han hecho es separar y quitar vidas humanas porque no comulgan con mis mismas ideas.

Leo que la Física Cuántica admite que: Las cosas obedecen a las palabras”.

De todos es conocidos los estudios acerca del poder de la mente. Los estudios del Dr. Bruce H. Lipton, Biólogo Celular y pionero en experimentos con células madre, que ha sentado las bases de la nueva Epigenética (del griego epien sobre, y genética. Esto es de la Wikipedia).

No quiero llenarte la cabeza de datos y más datos. Soy la primera que cada vez intento acordarme de menos cosas. Sí pretendo acompañarte en unas reflexiones acerca de la importancia de las palabras que pienso, que hablo, que escribo, que comparto. Algo que repito bastante a menudo en mis compartires de güasa (whatsapp).

Para ello es necesario convertirme en el observador de mi mism@. Cuestión que he leído en el magnífico libro del Dr. I. K. Taimni “Conocimiento de sí mismo”: observar mi cuerpo físico, mi cuerpo emocional, mi cuerpo mental, para no implicarme en sus procesos y así seré capaz de mejorarlos en todos los sentidos. Auto-observarme, no identificarme con ellos.

¡Que te estoy escuchando: “Eso es muy difícil”! ¿Lo ves? Tu mism@ te estás auto-limitando y no te puedes hacer una idea ¿o sí? de las cosas que vas a dejar de hacer por esa falsa creencia.

Cuando cambio mi pensamiento, cambio mi creencia. Cuando cambio mi creencia, cambio de forma de actuar. Cuando cambio mi forma de actuar: ¡¡¡Cambio mi Vida!!! :)




Encarna García y Muñoz.
Febrero 2018

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